Durante este verano, me paso a Microsoft
No, no se me ha fundido la neurona que me queda. Desde hoy comienzo un proyecto personal que llevo unos meses meditando, voy a pasar completamente mi vida digital personal y profesional a plataformas y dispositivos Microsoft.
Los que me conocéis, os extrañara un poco esta decisión. Durante los últimos 10 años siempre he sido muy crítico y contrario a cualquier cosa que saliera de Redmond y mucho más después de la genial operación del «genio» Elop con Nokia. Pero esto no siempre fue así.
A finales de los 80 ya desarrollaba aplicaciones para MS-DOS y a principios de los 90 comencé a trabajar con la primera versión de Visual Basic en desarrollos Cliente-Servidor para luego fundar a mediados de los 90 interActive Development Studio, una consultora tecnológica de desarrollos para plataformas Microsoft. En interActive desarrollamos una de la primeras aplicaciones empresariales para Internet en España con IIS/ASP y también una de las primeras aplicaciones móviles junto con Nokia. En fin, que mi vida entonces era Microsoft y era muy fan. Sin embargo a principios de siglo el idilio acabo y me pasé a desarrollos en plataformas Open Source y a Mac como ordenador personal.
¿La razón?, me había cansado que cada nueva versión de cualquier producto fuera un poco peor y tuviera más problemas que la anterior y de la falta de innovación.
Pues esto mismo me está ocurriendo ahora con Android y mucho más con OSX. Hace unos meses tuve la oportunidad de probar una Surface y la verdad es que me encanto. Pero sobre todo, al volver a mi Mac, tuve la misma sensación que cuando probé un MacBook en el 2004, lo que estoy utilizando me pareció tremendamente anticuado. Mi primera sensación es que la experiencia de uso y diseño de Windows 10 es muy superior a OSX, que muy poco ha cambiado en los últimos años. Y desde entonces empecé a darle vueltas e este proyecto que estoy comenzando ahora. Este post lo estoy escribiendo en OneNote 2016 en una flamante Surface 4 que me ha prestado Microsoft, junto con un Lumia 950, para completar la experiencia.
También hay otras razones que me lleva a esta decisión. Una de ellas es el trabajo que está realizando Satya Nadella desde que asumió el control de Microsoft. Atrás han quedado los días de Windows Vista y del megalómano y posiblemente peor directivo del mundo (si nos olvidamos de Stephen Elop) Steve Ballmer, que a punto estuvo de cargarse a Microsoft, insistiendo en un modelo tecnológico y de producto totalmente desfasado y lejos de la realidad del mercado. La prueba está en el fracaso de Microsoft en el mercado móvil.
En poco más de dos años Nadella ha abierto Microsoft al Open Source, a la nube, al cambio de imagen y a convertirla nuevamente en una empresa Cool, y esto me llama la atención. A eso me apunto. De hecho mucha gente habla de Microsoft como la nueva Apple. Esto quizás es mucho decir, pero Nadella está en camino a ello, ayudado también con una parálisis completa desde Cupertino.
Me lanzo entonces a esta aventura que puede o no, ser un amor de verano. Ya lo veremos, creo que merece la pena y es importante estar abierto a los cambios de tendencias. Mientras tanto os iré contando mis impresiones, sensaciones, descubrimientos y sufrimientos, que el seguramente el cambio tendrá sus momentos de tensión.