Cuando una cosa no se estrena pero pasa el tiempo, ¿sigue siendo algo nuevo o algo viejo sin estrenar?

Desde el verano de 2004 he creado y configurado unos 10 blogs personales y en ninguno llegue a escribir un solo post. El caso es que entre <strong>Aecomo</strong>, las conferencias y seminarios y los informes y análisis paso la mayor parte del día escribiendo y el resto leyendo, pero nunca encontré tiempo para el lado personal.

Dicen que quien no tiene nada que decir por más tecnología y facilidades de que disponga, nunca escribirá nada y eso siempre me traumatizó un poco, será mi caso? Creo que no, que solo era cuestión de empezar y a pesar que escribo todo el día, no es lo mismo escribir de la transformación de un fabricante de dispositivos móviles en proveedor de servicios de internet móvil que de las reuniones familiares de navidad, el Consejo Escolar del colegio de mi hijo, o la relación entre los gabinetes de prensa de las empresas y los bloggers.

Y para empezar me ayudó mucho abrir una cuenta en Twitter hace unos meses. Primero cree una para <strong>Aecomo</strong>, <a title=»Twitter Aecomo» href=»http://twitter.com/aecomo» target=»_blank»>@aecomo</a>, asociando el feed RSS a la cuenta y agregando varios comentarios adicionales y puntualizaciones al día. Pronto me vi contestando tweets personales de gente a la que sigo y publicando mis impresiones, también personales, sobre distintos temas. Como había incluido en <strong>Aecomo</strong> un script para leer la cuenta de Twitter en el portal, no me parecía lo más indicado que aparecieran estos temas en la portada, por lo que abrí otra cuenta para temas personales <a title=»Twitter rodriguezhernan» href=»http://twitter.com/rodriguezhernan» target=»_blank»><strong>@rodriguezhernan</strong></a>. Ahora llevo unas 700 actualizaciones y mas de 200 followers, pero lo más importante es que encontré la oportunidad para escribir sobre otras cosas que no sean tecnologías y modelos de negocio.

Y aquí estoy escribiendo este primer post de <strong>rodriguezmartinez.com</strong> y desde un iPhone, la verdad no es muy cómodo :), que lejos parece aquel 2004 cuando configuraba mi primer blog con TypePad, ni siquiera WordPress era muy conocido entonces y recién nacían las redes 3G en España y no había móviles con WiFi, pero bueno ya estoy hablando de tecnología otra vez.

No se muy bien que contare por aquí, ni con que frecuencia, lo que esta claro es que una vez que te sueltas no paras.