La Deshumanización de las redes sociales: Crítica a la postura de Mark Zuckerberg sobre el contenido generado por IA
En una reciente llamada con inversores de Meta Platforms para presentar los resultados del tercer trimestre de 2024, Mark Zuckerberg dejó clara su visión sobre el futuro de las plataformas de Meta: una proliferación de contenido generado por inteligencia artificial (IA) que reemplazará progresivamente las interacciones humanas auténticas. Esta postura no solo es preocupante, sino que también representa una traición al concepto fundamental de las redes sociales: conectar a las personas.
Zuckerberg destacó la «oportunidad de que la IA ayude a las personas a crear contenido que mejore la experiencia de sus feeds». Durante la llamada, afirmó: «Creo que vamos a añadir una categoría completamente nueva de contenido, que es contenido generado por IA o resumido por IA, o contenido existente recopilado por IA de alguna manera». Sin embargo, lo que realmente propone es llenar los feeds de los usuarios con contenido creado o modificado por IA, alejándolos aún más de las interacciones con amigos y familiares.
El propio Zuckerberg detalló la evolución de los feeds en las plataformas de Meta: «Si observas las grandes tendencias en los feeds a lo largo de la historia de la compañía, comenzó con amigos, ¿verdad? Así que todas las actualizaciones que había allí eran básicamente de tus amigos publicando cosas. Y luego entramos en esta era en la que añadimos contenido de creadores también, donde ahora un porcentaje muy grande del contenido en Instagram y Facebook no es de tus amigos. Puede que ni siquiera sea de personas a las que sigues directamente. Podría ser simplemente contenido recomendado de creadores que podemos determinar algorítmicamente que va a ser interesante y atractivo para ti».
Lo que describe es, esencialmente, redes sociales que ya no son sociales y que podrían dejar de contar con contenido creado por humanos. Tanto Facebook como Instagram ya se están moviendo en esta dirección, con el auge del spam generado por IA, influencers artificiales y ejércitos de personas copiando y pegando contenido de otras redes sociales para construir sus cuentas. Esta estrategia ha llevado, según Meta, a un aumento del 8% en el tiempo que las personas pasan en Facebook y un 6% en Instagram, todo a expensas de una realidad compartida y conexiones humanas genuinas.
Zuckerberg también señaló: «Otra parte que no he mencionado es la oportunidad de que la IA ayude a las personas a crear contenido que simplemente haga que las experiencias de los feeds de las personas sean mejores». Sin embargo, esta mejora parece basarse en saturar los feeds con contenido generado por IA, en lugar de fomentar interacciones humanas significativas.
Además, Meta está utilizando algoritmos para promover contenido de dudosa calidad, incluyendo «spam de IA» y clickbait, lo que demuestra una falta de responsabilidad corporativa. Al priorizar el incremento del tiempo en la plataforma sobre el bienestar de sus usuarios, Meta ignora las implicaciones éticas y sociales de llenar los feeds con contenido artificial.
La monetización de este modelo es aún más preocupante. Susan Li, directora financiera de Meta, afirmó que «más de un millón de anunciantes utilizaron nuestras herramientas de IA generativa para crear más de 15 millones de anuncios en el último mes». Esto significa que los usuarios no solo están siendo bombardeados con contenido irrelevante, sino que también están siendo objeto de publicidad altamente personalizada y posiblemente invasiva, todo en nombre de las ganancias corporativas.
La postura de Zuckerberg refleja una desconexión alarmante con las necesidades y deseos de los usuarios. En lugar de fortalecer las conexiones humanas y fomentar comunidades online sanas, Meta parece decidido a transformar sus plataformas en máquinas de contenido automatizado que priorizan la interacción superficial sobre la conexión relevante y significativa.
Es hora de cuestionar hacia dónde nos lleva esta estrategia. ¿Queremos que nuestras interacciones online sean dictadas por algoritmos y contenidos generados por máquinas? ¿Estamos dispuestos a sacrificar la autenticidad y la conexión humana en favor de un feed infinito diseñado para mantenernos enganchados?
La sociedad debe reflexionar sobre el papel que juegan las grandes corporaciones tecnológicas en nuestras vidas y exigir un cambio de rumbo. Las redes sociales tienen el potencial de conectar al mundo, pero solo si se mantienen fieles a su propósito original: facilitar conexiones humanas reales y significativas.